Batman vuelve
Este artículo contiene spoilers, no leer si no se quiere conocer partes esenciales de la trama de la película.
Batman tiene que hacer frente a dos nuevos enemigos, el Pingüino y Catwoman, quienes unen fuerzas para destruirle, mientras un magnate trata de convertir al Pingüino en el nuevo alcalde de Gotham.
EL MURCIÉLAGO, LA GATA Y EL PINGÜINO
Tras el enorme éxito de Batman (1989), estaba claro que se realizaría una secuela, pero pese a la insistencia de la Warner, su director Tim Burton no estaba por la labor, ya que no estaba satisfecho con el resultado de la primera aventura del Caballero Oscuro. "Sentí que no había hecho el 100% de lo que quería hacer con esa película," explicaba Burton a Starlog. De todas formas, el proyecto fue adelante con la idea de dar con un enfoque que gustara al director.
Sam Hamm, guionista de la película original, escribió un guion para la secuela, que incluía a Catwoman y el Pingüino. "[El estudio] realmente quería al Pingüino," explicaba Hamm en el documental Shadows of the Bat: The Cinematic Saga Of The Dark Kinight. "Porque lo veían como el segundo villano de Batman. Queríamos hacer a Catwoman, así que terminamos haciendo a Pingüino y Catwoman." El libreto de Hamm no interesó a Burton, aunque sería acreditado como co-autor de la historia de Batman vuelve (Batman Returns, 1992).
Después fue contratado Daniel Waters (Demolition Man). Ayudó que Denise Di Novi, productora de Batman vuelve, había sido la productora de Escuela de jóvenes asesinos (1988), película de culto que Waters había escrito. Además el guionista le había presentado tiempo atrás a Burton, una idea para una secuela de Bitelchús (1988). El trabajo de Waters con Batman vuelve gustó a Burton, quien trabajó con él en cinco borradores, y cuyo trabajo le convenció de realizar la secuela. El 9 de enero de 1991, Warner Bros. anunció que el director rodaría Batman vuelve. Burton trató de hacer algo original, y buscó "cómo podía hacerlo más loco, más increíble; en resumen, mejor," según contaba el director a la revista Impact. Waters comenzó su trabajo a mediados de 1990, y se pasó un año trabajando en el guion. El primer borrador tenía 160 páginas, lo que habría dado pie a una película enorme y muy cara, desde ahí comenzó a pulir el guion hasta dejarlo en uno más realista.
En las versiones de guion de Waters, se incluía el personaje de Robin, mostrado como un mecánico que ayudaba a Batman, después de que el batmóvil, manipulado por el Pingüino, se estrellase en su taller. Se llegó a escoger a Marlon Wayans para el papel, y se construyeron los decorados y se diseñó el vestuario del personaje, pero finalmente la escena se descartó en el quinto borrador, y se reemplazó por Bruce siendo quien reparara el vehículo. En el primer borrador del guion, Max Shreck era el hermano mayor del Pingüino. E inicialmente se incluía el personaje de Harvey Dent, pero sería también descartado.
Después de eso, Wesley Strick (El cabo del miedo) entró para una labor final de reescritura sin acreditar. "Estaba adoptando un enfoque mucho más operístico del que Tim buscaba," confesaba Waters a la revista Fangoria. "Tim quería cambios, y yo no los hacía. Después del quinto borrador, estaba agotado y muy enojado porque me pedían ciertos cambios. Así que Tim finalmente pensó que era más fácil conseguir otro guionista, que seguir discutiendo conmigo sobre los cambios que quería." Strick fue contratado para aportar la subtrama del secuestro de los primogénitos de Gotham, para darle a la película una especie de trama, algo de lo que la película carecía. El guionista se pasó cuatro meses en el set de rodaje junto a Burton.
REPARTO
Michael Keaton repitió en el papel de Batman, y recibió a cambio un sueldo de 10 millones de dólares. Keaton pidió eliminar muchos de sus diálogos, para hacer que Batman fuera menos hablador de lo que estaba previsto en el guion.
Danny DeVito se hizo con el papel del Pingüino, el cual parecía haber nacido para interpretar. De hecho, después del estreno de Batman comenzaron a correr rumores de que DeVito daría vida al villano en la secuela. Tras reunirse con Burton, al actor le interesó el enfoque que éste tenía sobre el personaje, y aceptó participar en la película. "El Pingüino seguía siendo mi personaje menos favorito de los cómics," declaraba Burton a Mad Movies. "Pero la forma en que Danny DeVito lo interpretó me conquistó, y llegué a adorarlo. Casi todo en el personaje del Pingüino proviene de Danny DeVito." El actor se mantenía durante el rodaje siempre dentro del personaje, y no permitía la visita ni de familiares ni de ejecutivos. El aspecto de Pingüino vino inspirado por el personaje de Lon Chaney en La casa del horror (1927).
Burton escogió a Annette Bening para dar vida a Catwoman, pero tras quedar embarazada, tuvo que rechazar el papel. Sean Young quiso hacerse con el papel de la villana. La actriz a punto estuvo de trabajar en Batman, pero se rompió la clavícula al caerse de un caballo, y fue sustituida por Kim Basinger. Se obsesionó hasta tal punto con dar vida a Catwoman, que se presentó en el estudio (acompañada de un ayudante), donde Burton tenía sus oficinas buscándole, y al no dar con él, entró en la oficina de Mark Canton, en la que se encontraba Michael Keaton, y exigió que la contrataran. Si eso no fuera suficiente, asistió a un programa de entrevistas para hablar de la injusticia de su situación, e incluso acudió al "The Joan Rivers Show" vestida de Catwoman. Finalmente la escogida fue Michelle Pfeiffer, quien estuvo cerca de sustituir a Young en Batman, pero Keaton la vetó, ya que habían sido pareja, y él trataba de volver con su ex-mujer. La actriz participó en la película cobrando un cheque de 3 millones de dólares. Cuando llevaba leída sólo la mitad del guion, Pfeiffer le dijo a Burton que haría la película, seguro que el que la villana fuera una heroína de su infancia ayudó a su decisión. Para ser una convincente Catwoman, Pfeiffer entrenó durante meses en el uso del látigo, además de entrenarse en artes marciales y gimnasia. El primer día con su entrenador de látigo le dio en la cara con él, y le dejó sangrando. La actriz hizo aportaciones a la película, como el momento en que Catwoman se lame para limpiarse, idea que gustó a Burton e incluyó en la película.
Christopher Walken dio vida al tercer villano de la película, Max Shreck. El actor recibió una llamada de su agente diciéndole que Burton y los productores de la película lo querían para el papel, y el resto es historia. Cuando se reunió con Burton, este le mostró una foto de Vincent Price en una vieja peli, y quiso que el look de Shreck fuera similar. El propio actor aportó ideas propias a Shreck, recordó un personaje de "El gran Gatsby" que llevaba gemelos hechos con muelas, y le preguntó a Burton si podía llevar unos, al director le gustó la idea y ese mismo día Walken los tuvo, lo que le ayudó a meterse en la piel del villano.
Michael Murphy dio vida al alcalde de Gotham. El actor recibió una llamada preguntándole si le interesaría trabajar en la película, su respuesta fue positiva y le enviaron el guion, éste le gustó y aceptó el papel.
Paul Reubens y Diane Louise Salinger, que habían trabajado a las órdenes de Burton en La gran aventura de Pee-wee (1985), fueron los padres del Pingüino. Éste fue el primer papel de Reubens tras el escándalo de su detención, en julio de 1991, por exhibicionismo en un cine para adultos.
Doug Jones (Hellboy) tiene un pequeño papel como el payaso delgado, uno de los miembros de la banda del Pingüino. Jones consiguió el papel gracias al especialista Bob Yerkes, quien lo recomendó al departamento de especialistas de la película. Jones tuvo que hacer una audición y poner las piernas detrás de la cabeza, una vez Burton lo vio, fue contratado, aunque Jones pensaba que era sólo un personaje muy secundario, descubrió que era un papel mayor y que lo contrataban por siete semanas (que al final se convirtieron en catorce).
El resto del reparto lo formaron Michael Gough (repitiendo su papel de Alfred, el mayordomo y amigo de Bruce Wayne), Pat Hingle (haciendo lo propio como el comisionado Gordon), Cristi Conaway (en el papel de la princesa de hielo), y Andrew Bryniarski (como Chip, el hijo de Shreck).
RODAJE
La película comenzó a filmarse en septiembre de 1991, y el rodaje terminó en febrero del año siguiente. Batman se filmó en los Pinewood Studios de Inglaterra, y allí se mantuvieron los decorados de la película, mientras esperaban el inicio del rodaje de la secuela, pero la economía del país británico había empeorado cuando debían rodar Batman vuelve, por lo que decidieron filmar la secuela en Los Angeles. Además, según Burton, influyeron otros factores para el cambió de emplazamiento, como los problemas con la prensa durante el rodaje de la primera película, el poder utilizar a más gente de su circulo y no estar obligado a trabajar con gente de Inglaterra, y el dar con otro tipo de energía diferente para la secuela. Aprovecharon los pocos decorados que necesitaban y el resto se diseñó de nuevo. Se ocuparon siete estudios de sonido de Warner Bros. para la película (en el mayor de ellos se construyó el set de Gotham Plaza, y que fueron necesarias 12 semanas para construirlo), además del estudio 12 de Universal Studios, que era el más grande de Hollywood en aquel momento, donde se edificó la guarida del Pingüino.
Anton Furst, el diseñador de producción Batman estaba ocupado con otros proyectos y no pudo participar en la secuela, por lo que Bo Welch lo sustituyó. Burton le dio carta blanca al diseñador, y le dijo que no tuviera en cuenta el trabajo de Furst. Sus influencias fueron las obras de los pintores Charles Sheeler y Georgia O’Keeffe (de la segunda más concretamente los paisajes urbanos que hizo de Nueva York), además de arte nazi y fotos de ferias mundiales. Según contaba Welch a la revista Cinefantastique, la nueva Gotham poseía, "una estética muy opresiva y decadente, con mucha arquitectura neofascista de feria mundial superpuesta a una antigua ciudad estadounidense. Se pueden encontrar rastros del expresionismo alemán." Welch también se encargó de diseñar el batski de Batman, para el cual realizó treinta diseños en papel, hizo maquetas de tres de ellos, y de esos se quedaron con uno que esculpieron en espuma, que fue el diseño definitivo. Además creó el batarang programable de Batman, y los paraguas del Pingüino que poseen todo tipo de gadgets.
Para diseñar Gotham Plaza, Welch creo una maqueta de 30 centímetros de ancho por 1,2 metros de alto, y para componer el resto de la ciudad, mantuvo esas proporciones. Para la batcueva se creó un pequeño set, si se compara con el resto, y que se completó con un matte painting.
Batman vuelve era la película estrella de Warner para 1992, y el estudio trató de mantenerla en el mayor de los secretos, y elevó las medidas de seguridad, para lo que tomaron algunas decisiones un poco excesivas. Los directores de arte debían mantener las persianas de sus oficinas cerradas, y para poder entrar en los sets, los actores y el equipo debían portar credenciales de identificación con el falso título por el que era conocida la película "Dictel".
Rodar con animales nunca es tarea fácil, si no que se lo digan a DeVito, quien fue atacado por un mono en la ingle. Esto sucedió en la escena en la que un mono le entrega una nota de Batman. Cuando hicieron el primer ensayo, todo fue sobre ruedas, pero para el siguiente, DeVito utilizó el enjuague bucal que simulaba el líquido negro que le sale de la boca al Pingüino, en esa ocasión, el mono entre ver al actor caracterizado como el villano, y el líquido saliendo de su boca, se quedó paralizado y atacó su entrepierna. Como el traje era acolchado no sucedió nada más allá de un susto para el actor.
Ese mono no fue el único animal visto en la película, el Pingüino posee un ejército compuesto por cientos de pingüinos. Utilizaron tres tipos de pingüinos reales, cada uno de un tamaño diferente. En el set donde trabajaban con los pingüinos hacia frío, mucho frío, para el buen cuidado de los animales, y para ello mantenían el agua fría y usaban enormes aires acondicionados. Las aves incluso tenían su propia piscina y zona de "camerinos" refrigerados.
Como había cosas que los pingüinos reales no podían hacer, fue necesaria la creación de pingüinos animatrónicos, y ahí es donde entró Stan Winston y su equipo, compuesto por 56 personas. Crearon 36 pingüinos animatrónicos, de tres tamaños distintos, tan realistas que costaba distinguirlos de los reales. Mediante el uso de cables podían moverles el cuello, algunos eran manipulados desde la parte inferior del escenario, y los movimientos de la cara, el pico, los ojos y las aletas se realizaban por radio. Además construyeron 6 trajes para los pingüinos de mayor tamaño que los animatrónicos, dentro de los cuales iban personas de baja estatura, estos trajes también necesitaban control por radio y uso de cables. Mediante la mezcla de pingüinos reales, animatrónicos y gracias a los efectos visuales que los multiplicó ópticamente, daba la impresión de que el ejército del Pingüino estaba compuesto por cientos de aves.
Los efectos visuales de la película se repartieron entre diferentes compañías. "Boss Films" se encargó de multiplicar a los pingüinos ópticamente. "Video Image Associates" fue la responsable de crear la protección del batmóvil, y los murciélagos que salen del árbol de Navidad de Gotham Plaza. "4-Ward Productions" construyó las maquetas de batmóvil, el batmisil, el batski, Gotham Plaza, el centro de Gotham y Shreck Industries. "Stetson Visual Services" se encargó de la maqueta del Zoo donde el Pingüino tiene su guarida. Y "Matte World" fue la responsable de los matte paintings.
Winston también se encargó del maquillaje del Pingüino. Para convertir a Danny DeVito en el archienemigo de Batman, fueron necesarias prótesis para su cara y un traje. Inicialmente eran necesarias sesiones de cuatro horas y media para ponerle tanto el maquillaje como el traje, que fueron reducidas a tres al final de rodaje. El relleno del traje tenía un peso aproximado de 27 kilos. La saliva negra que hecha por su boca, era enjuague bucal con un colorante alimentario, y antes de cada toma DeVito se lo echaba en la boca.
Para el traje de Catwoman, Burton tenía claro como quería que luciera. "Negro, brillante y gomoso," declaraba el diseñador de vestuario Bob Ringwood a Cinefantastique. Ringwood convirtió los dibujos del director en un traje real. El traje fue un engorro para Pfeiffer. "Fue el disfraz más incómodo que he llevado," declaraba la actriz al The Hollywood Reporter. "Tuvieron que empolvarme, ayudarme a ponérmelo, y luego envasarlo al vacío. Lo pintaron con un acabado de silicona para darle su brillo característico. Tenía esas garras, y siempre se me enganchaban. La máscara me aplastaba la cara y me asfixiaba… teníamos muchos problemas que solucionar." Entre ellos, no habían previsto que la actriz tendría que ir al baño con el traje puesto, así que tuvieron que modificarlo. Además la máscara apenas le permitía oír. Y un mal diseño de las botas provocaba que la actriz se inclinase hacia delante cuando se levantaba.
Hicieron mejoras en el traje de Batman, éste se ajustaba mejor al cuerpo de Keaton que el que había portado en la primera parte, y era más flexible, lo que le permitía moverse con más facilidad. "Lo cierto es que el nuevo traje de Batman se acerca mucho más al concepto original que teníamos para la primera película," explicaba Ringwood a la revista Starburst. "Ahora se parece más a una armadura que a un traje musculoso. También hemos modificado la máscara reforzando las cejas y la nariz, y cambiando la forma de los ojos y la barbilla."
Keaton y Pfeiffer habían mantenido una relación sentimental años antes del rodaje de Batman vuelve, y aunque sus escenas íntimas podrían resultar incómodas, la actriz lo negó, e incluso llegó a declarar que le ayudó el tener un pasado con Keaton. "Tenemos suficiente historia real entre nosotros como para que esas escenas funcionaran mejor," declaraba la actriz a Starlog, "pero no tanta como para que interfiriera."
Las escenas que Pfeiffer mantuvo con DeVito fueron otro cantar, como el actor no se salía del personaje, no paraba de gruñirle y le lanzaba miradas terroríficas a la actriz, de modo que Pfeiffer se apartaba de su compañero de reparto.
Uno de los momentos más chocantes de la película, es aquel en que un pájaro sale de la boca de Catwoman. Esta escena se rodó realmente sin el uso de efectos visuales, Pfeiffer se metió un pájaro vivo dentro de su boca. Por suerte, la escena se rodó en la primera toma.
Fue un rodaje duro para Burton. Además de tener que lidiar con una producción enorme, se sumaba la muerte de un amigo cercano y tenía problemas con su pareja.
Como director de segunda unidad, Burton contó con el editor Billy Weber, con quien había trabajado en La gran aventura de Pee-wee (1985), a sabiendas de que éste quería dar el salto a la dirección. La segunda unidad estaba compuesta por un equipo de entre unas 50 a 60 personas, y estuvo rodando a lo largo de 50 días. Entre las secuencias que cayeron entre las asignaciones de Weber estaban las persecuciones de coches, el prólogo con Paul Reubens y Diane Salinger, o escenas con los pingüinos.
Para la escena del baile de máscaras, al que acuden Bruce y Selina, Bob Ringwood y Mary E. Vogt tuvieron que crear más de 150 trajes en un plazo de 8 semanas, y Ted Shell se encargó de fabricar el mismo número de máscaras. En la escena, hace acto de aparición el Pingüino a través del suelo, tras provocar una explosión, para ese momento participaron más de 90 especialistas, de los cuales más de 12 salieron volando por los aires.
No fue la única explosión que trajo complicaciones al rodaje. Para la escena en la que Catwoman vuela por los aires los grandes almacenes de Shreck, provocaron una gran explosión dentro del estudio. Para mayor seguridad, los bomberos estaban presentes y utilizaron dobles para los actores. "Las llamas salieron disparadas muy, muy lejos," contaba Stefan Czapsky, el director de fotografía, a American Cinematographer. "Creo que le quemaron la espalda a la mujer que hacía de doble de Michelle Pfeiffer."
Chris Lebenzon se convirtió en el editor de la película gracias a la ayuda de Daniel Waters, quien conoció a Lebenzon en El gran Halcón (1991), película de la que era guionista. El editor se convertiría en un miembro fijo del equipo de Tim Burton.
En los pases de prueba al público le gustó el personaje de Catwoman, pero moría al final de la película, el estudio quiso que el público supiera que seguía viva. De modo que dos semanas antes del estreno de la película, se filmó el plano de Catwoman emergiendo en el plano final de la película (que tuvo un coste aproximado de 250.000 dólares).
Danny Elfman regresó para componer la música de la película, y tras una difícil experiencia trabajando en la primera entrega, aquí fue todo sobre ruedas para el compositor, y se divirtió creando la música.
Batman vuelve llegó a las salas de cine el 19 junio de 1992 batiendo récords. Tuvo la mayor recaudación de la historia en el fin de semana de estreno, con unos increíbles 47,7 millones de dólares. Además fue la segunda película de la historia en alcanzar los 100 millones de recaudación más rápido (necesitó sólo 11 días), siendo la primera Batman que lo consiguió en 10 días. Su recaudación final en Estados Unidos fue de 162.924.631 de dólares (tercera película más taquillera del año en su país de origen), y su recaudación final a nivel mundial fue de 266.941.512 de dólares (sexta película más taquillera del año). Warner estimó que el presupuesto de la película fue de 55 millones de dólares, pero la productora Denise Di Novi declaró a la revista Maclean’s que ascendía a 65 millones, lo que la convertiría en una de las películas más caras de la historia en el momento de su estreno.
Su éxito fue tal, que como recompensa, Warner les dio a sus empleados cuatro días de descanso durante el fin de semana del 4 de julio.
Pero no todo fue tan positivo en su estreno. La película resultó ser demasiado oscura para los niños, y recibió quejas por parte de padres enfurecidos. Además Warner vio el potencial de la película con el merchandising gracias a Batman, algo que quiso explotar totalmente, pero el tono oscuro de la película no ayudaba a venderla. "En la segunda, empezamos a recibir comentarios de McDonald's como: '¿Qué es todo eso negro que sale de la boca del Pingüino?'," contaba Burton a The Hollywood Reporter. Tanto las empresas jugueteras, como las de comida rápida no estaban a gusto con la película. Esa fue la razón por la que para la tercera entrega, Warner decidió pasar el testigo de la dirección a Joel Schumacher, y darle un toque más ligero a la franquicia.
La película recibió dos nominaciones al Oscar, en las categorías de mejores efectos visuales (Michael L. Fink, Craig Barron, John Bruno y Dennis Skotak) y mejor maquillaje (Ve Neill, Ronnie Specter y Stan Winston).
VALORACIÓN
Batman vuelve me parece un film superior a la primera entrega, le veo más personalidad, es más burtoniana, y eso me gusta, prefiero una adaptación de cómic con sus luces y sombras, con un artista detrás, que algo genérico que sea más fiel al cómic.
Siempre se ha dicho que Batman vuelve, que el Caballero Oscuro se convierte en un personaje secundario en su propia película, no lo veo así, lo que sucede es que al tener cuatro personajes importantes, el guion trata de equilibrarlos, tanto, que al final los cuatro tienen el mimo nivel de protagonismo. No lo veo un problema, Batman siempre debe estar oculto en las sombras e intervenir en los momentos necesarios, y el resto de personajes son muy interesantes.
La película hace algo muy bien, y es que pese a tener un gran número de villanos (Pingüino, Catwoman, y Shreck), la película funciona, no hay sensación de saturación. Sigue siendo la película que mejor ha reunido varios villanos y lo ha hecho funcionar, una piedra en la que suelen tropezar la mayoría de películas del género.
Pero el guion tiene problemas, como por ejemplo, que Batman encuentre a la princesa de hielo, la mujer que secuestra el Pingüino, simplemente subiéndose a la azotea de un edificio, sin pistas, en una ciudad de las enormes dimensiones de Gotham, en plena noche, y al poco de suceder el secuestro. Todo el plan del Pingüino de tenderle una trampa al murciélago, depende de que éste encuentre a la mujer, pero todo es dejado al mero azar. Es un agujero de guion del tamaño de la batcueva. Además el guion una vez llega a la mitad de su metraje, se olvida de la subtrama de la planta de energía que quiere construir Shreck. Además, Catwoman se alía con el Pingüino para acabar con Batman, porque según dice, trató de matarla, pero parece que se olvida que su jefe trató de hacer lo mismo antes (y no en defensa propia como Batman), y no trata de vengarse de él, pero más tarde cuando llega la fiesta de máscaras, se acuerda que tiene ese tema pendiente y lleva un arma para acabar con Shreck. Esto sucede para que Catwoman y el Pingüino colaboren juntos como los villanos que son, pero resulta un tanto forzado. El guion parece que recupera una trama o idea cuando le interesa, o la deja de lado cuando no le conviene. A Burton lo que le interesa es la relación entre sus personajes y crear la atmósfera del mundo de Batman, y ahí la película brilla.
Batman vuelve es un festival de monstruos, los tres personajes principales (los tres animales) son unos freaks, seres rotos y con problemas, pero Burton no los juzga, de hecho, el verdadero villano de la película, el verdadero monstruo, es Shreck, en apariencia una persona "normal". Esa normalidad dentro del universo de Burton es el mal, y los freaks son unos incomprendidos, creo que Burton se puede identificar con los tres personajes principales. Esto es lo más interesante de la película, de una forma sencilla y condensada, tiene una visión satírica de la sociedad y también de la política, ya que muestra a un multimillonario manipulando a personas y a la sociedad para colocar a una persona en el poder para su propio beneficio, y llega a incentivar una serie de ataques (terroristas) a la ciudad para conseguir que el Pingüino sea elegido alcalde, alguien cuyos méritos son ser popular, y todo esto en el año 1992. Me parece una película muy adelantada a su tiempo.
Además es una oscura película navideña (como lo son Eduardo Manostijeras y Pesadilla antes de Navidad), bajo esa nieve blanca que cubre Gotham, se esconde algo oscuro.
Los actores están geniales, siendo los que más destacan Pfeiffer con su inolvidable Catwoman (uno de esos castings perfectos), y Walken como el terrorífico Shreck. DeVito es memorable como el Pingüino, pero al ser un personaje tan lascivo y horrible no cala tanto como la sutileza de Walken o el magnetismo animal de Pfeiffer. Pero me gusta su reinvención, en la anterior encarnación, la de Burgess Meredith en la serie de los 60, no dejaba de ser un personaje rechoncho con paraguas y que fumaba cigarrillos con boquilla (que aquí escupe cuando le ponen una en la boca), y la película abrazó totalmente la idea de que es un hombre-pingüino.
Me parece increíble que el diseño de producción de la película no fuera siquiera nominado al Oscar, cuando se trata de uno de las películas con uno de los diseños más espectaculares de los noventa. Es totalmente inmersiva y te mete de lleno en este mundo de Batman, el cual es una representación de la psique de Bruce Wayne/Batman. El diseño de tintes fascistas refleja como siente éste que es su ciudad, llena de corrupción y falta de libertad, donde un ser horrible (en todos los sentidos) va a ser elegido alcalde, y un millonario poderoso manipula a todos para obtener sus fines.
El Pingüino es el reflejo oscuro de Batman, al igual que él, es de alta cuna, no tiene a sus padres, usa todo tipo de gadgets, y tiene una guarida secreta, es en lo que Batman podría llegar a convertirse, en un ser lleno de odio.
Catwoman es un ser complejo, al igual que Batman tiene dudas sobre su identidad, el intento de asesinato de Shreck la hace despertar, y descubrir lados de su personalidad que desconocía. La apocada secretaria esconde un aminal feroz en su interior, y al ponerse el traje de Catwoman puede dar rienda suelta a sus instintos. Pero no sabe cual de las dos personas es, y eso la convierten un ser lleno de dudas. Sólo al final cuando decide acabar con su ex-jefe demuestra quien realmente es. Además está destinada a ser Catwoman, está rodeada de símbolos felinos, desde la gata que posee o el logo de la empresa de Shreck que es un gato, Catwoman está esperando a Selina para salir a la superficie. Los tres hombres de la película tratan de matarla en diferentes momentos, y los tres la lanzan desde las alturas, es una mujer chocando continuamente con el patriarcado, y aunque le cueste las nueve vidas, seguirá luchando por ser ella misma.
La mejor escena de la película es la del baile de máscaras, en el que las dos únicas personas que no las llevan son Bruce y Selina, precisamente quienes acostumbran a llevar una, como si la película nos dijera que su disfraz es de las personas que fingen ser en el mundo real, y realmente son los seres que muestran cuando se enfundan en sus trajes. Bruce y Selina descubren sus identidades secretas a través del diálogo sobre el muérdago, que ambos mantuvieron siendo Batman y Catwoman, y se preguntan si ahora tienen que ponerse a luchar. Esa escena define perfectamente a los personajes, y la relación de amor/odio entre Batman y Catwoman.
A Burton no le interesa satisfacer a los fans del cómic, se toma sus libertades, y toma decisiones curiosas, como la falta de protagonismo del comisionado Gordon, el dar de lado a Harvey Dent (que había sido presentado en la anterior película), o restarle minutos de pantalla a Batman, pero el director está tomando lo que más le interesa del universo de Batman, y llevándolo a su terreno, y eso me gusta, por lo menos va a por todas con ello y vemos una película con alma. Considero éste uno de los mejores trabajos de su carrera.
Es un gusto ver una película que no parece pensada para satisfacer a las compañías de juguetes y de comida rápida (como sí serían Batman Forever y Batman y Robin), hoy día sería impensable ver una película de Batman con Catwoman metiéndose un pájaro vivo en su boca, tener a un Pingüino lascivo del que sale bilis negra de su boca y come pescado crudo, ese beso con lengua que Catwoman le da a Batman, o al Pingüino soltar a Catwoman la frase (en versión original): "Just the pussy I've been lookin' for."
Batman vuelve es una gran película de superhéroes, posiblemente una de las mejores del género. El público no la trató demasiado bien en el momento de su estreno, pero creo que el tiempo la ha colocado en su lugar. Es una película desbordante de grandes ideas visuales (ese neón que pone "Hello There" en el apartamento de Selina, y que se convierte en "Hell There" después de que ella destroce el lugar), y profundamente atractiva, con algunos personajes que han quedado para el recuerdo, y que resulta realmente entretenida. Es extraña y oscura, pero también fascinante, irreverente, espectacular y satírica. El Caballero Oscuro estuvo de regreso con una gran aventura.
CURIOSIDADES
El nombre de Max Shreck es un homenaje al actor del mismo nombre, que protagonizó Nosferatu (1922).
Tim Burton declaró que prefiere Batman vuelve por encima de Batman.
Danny DeVito fue nominado al Razzie en la categoría de peor actor secundario.
Michelle Pfieffer reconocía que como movían continuamente los edificios de los sets de Gotham, se perdía en los escenarios.
Con el estreno de la película, se lanzaron videojuegos basados en ella para varias consolas como Game Gear, Master System, Genesis, Sega CD, Amiga, y también para MS-DOS.
En la oficina de Shreck, se puede ver al villano en fotos con Dean Martin, Elvis, Sammy Davis Jr. o Arnold Schwarzenegger. Éste último sería Mr. Freeze en Batman y Robin (1997).
Fue nominada a los premios Hugo a la mejor presentación dramática (Tim Burton, Daniel Waters, Sam Hamm y Bob Kane).
Fue nominada a los premios Saturn en las categorías de mejor película de fantasía, mejor actor secundario (Danny DeVito), mejor director (Tim Burton), mejor vestuario (Bob Ringwood, Mary E. Vogt y Vin Burnham) y mejor maquillaje (Stan Winston y Ve Neill).
La película utiliza el famoso grito Wilhelm, cuando Batman golpea a un payaso y lo lanza por el aire.
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Danny DeVito shares hilariously scary story of monkey attack on Batman Returns set (Entertainment Weekly, 8 oct 2016)
Danny DeVito recalls a monkey mishap on Batman Returns: 'He leapt right at my balls' (Entertainment Weekly, 30 mar 2019)
Interview: Wesley Strick (We Are Cult, 10 ene 2018)
The Billy Weber Interview (We Are Cult, 3 jun 2020)
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Doug Jones: For The Love Of Horror (Starburst Magazine)
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Hollywood launches a blockbuster sequel (Maclean's, 22 jun 1992)
Danny Elfman interview – Raimi & Burton (FlexibleHead, 13 may 2019)
Batman Returns Official Movie Souvenir Magazine
Labels: cine 90's, películas de culto






