Indiana Jones y la última cruzada

"¡No me llames Junior!"

Este artículo contiene spoilers, no leer si no se quiere conocer partes esenciales de la trama de la película.

Indiana Jones se ve envuelto en una nueva aventura, cuando su padre desaparece misteriosamente. El arqueólogo iniciara su búsqueda, que implica también encontrar el Santo Grial, y evitar que caiga en manos de los nazis.

LA ÚLTIMA AVENTURA

La saga de Indiana Jones fue planificada como una trilogía, de hecho, Steven Spielberg y Harrison Ford habían firmado un contrato por tres películas, y tras el éxito que supuso En busca del arca perdida (1981) e Indiana Jones y el templo maldito (1984), estaba claro que tarde o temprano llegaría la tercera entrega, algo que haría bajo el título de Indiana Jones y la última cruzada (Indiana Jones and the Last Crusade, 1989). 

Además de tratar de cumplir su contrato, Spielberg admitió que la otra razón que le llevó a rodar la tercera aventura del Dr. Jones, fue el intentar reparar las críticas negativas recibidas por El templo maldito. "No estaba nada contento con la segunda película," llegó a declarar el director al Sun-Sentinel en 1989. "Era demasiado oscura, demasiado subterránea y demasiado terrorífica. Pienso que superó a Poltergeist. No hay ni una pizca de mis sentimientos personales en El templo maldito."

Al mismo tiempo que desarrollaba Indy III, Spielberg estaba trabajando en Rain man (1988), pero la fecha de inicio de rodaje de la nueva aventura de Indy se le echaba encima, y el guión de Rain man no estaba terminado, así que al director no le quedó más remedio que abandonar la película protagonizada por Tom Cruise y Dustin Hoffman, y meterse de lleno en La última cruzada, tal y como se había comprometido con George Lucas. Rain man acabaría ganando el Oscar a la mejor película.

La idea original de Lucas, productor y creador de Indy, era situar la historia en un castillo encantado, pero Spielberg había realizado Poltergeist (1982) y quería hacer algo diferente. Después se plantearon utilizar el Santo Grial como artefacto a buscar, pero fue inicialmente rechazado, "por ser demasiado etéreo," declaraba Lucas.

Partiendo de la leyenda china del Rey Mono (planteamiento que ya había sido barajado para la segunda parte), Lucas escribió en septiembre de 1984 un tratamiento de guión de ocho páginas para "Indiana Jones and the Monkey King", que incluía la fuente de la juventud como nuevo MacGuffin. Además de otros elementos que se mantendrían hasta la película final, como los nazis como villanos, una persecución de lanchas, el regreso de Marcus Brody, una mujer arqueóloga o una secuencia de acción en un tanque.

En octubre de 1984, Chris Columbus fue contratado para escribir el guión, el buen entendimiento con Spielberg en Gremlins (1984), Los Goonies (1985) y El secreto de la pirámide (1985) seguro que ayudó a su elección. Columbus escribió dos versiones del guión, cuyo teaser tenía lugar en un castillo encantando de Escocia.

Según contó a theraider.net, Spielberg opinaba que este guión, "era optimista y lleno de la misma nostalgia que usamos en En busca del arca perdida, así que en ese sentido Chris dio en el clavo. Pero no creo que ninguno de nosotros quisiera ir a África durante cuatro meses e intentar que Indy montara un rinoceronte en una persecución multi-vehicular, que era una de las secuencias que Chris había escrito. Una vez me metí en el guión, comencé a sentirme muy viejo, demasiado viejo para dirigirlo." De esa forma el guión fue rechazado.

Se descartó al Rey Mono, y Lucas retomó la idea del Santo Grial, pero esta vez el productor hizo ciertos cambios en su mitología, decidiendo que tuviera el poder de la inmortalidad. Pero aún así la historia no convencía a Spielberg, algo que cambió cuando al director se le ocurrió la idea de introducir al padre de Indy. "El Grial no ofrece muchos efectos visuales y no promete un gran clímax físico," admitía Spielberg a la revista Empire. "Sólo pensé que el Grial que todos buscan podría ser una metáfora de un hijo que busca la reconciliación con un padre, y un padre que busca la reconciliación con un hijo."

Con la idea de que el padre de Indy fuera uno de los pilares de la historia, Lucas contrató en enero de 1986 a Menno Meyjes para escribir un nuevo guión, por recomendación de Spielberg. El guionista había escrito para el director El color púrpura (1985) y El imperio del sol (1987). Meyjes escribió el guión y realizó una revisión posterior, que incluía nuevos elementos que se mantendrían hasta el guión final, como a Indy buscando a su padre, el regreso de Sallah, un viaje a Venecia y otro a Petra, y la muerte de un nazi al tocar el Grial. En la segunda revisión del guión, se introducía a una mujer como líder de los nazis. La escena inicial situaba a Indy en México tratando de conseguir una máscara de la muerte de Montezuma. Este guión tampoco convenció, aunque Meyjes consiguió un crédito en la película como co-autor de la historia junto a George Lucas.

A comienzos de 1987, Spielberg llamó a Jeffrey Boam (Jóvenes ocultos, El chip prodigioso) para que se hiciera cargo del guión. "George Lucas no me dio nada," recordaba el guionista a la revista Starlog. "Me dieron una lista completa de elementos. Nos encontraríamos con el padre de Indy, regresarían Sallah y Brody, habría un personaje femenino para entrar en conflicto con Indy, y habría una aventura. George me dijo lo que quería en la historia y entonces dijo: 'Dame una historia'."

La idea de Boam fue profundizar en el personaje del arqueólogo, básicamente contar, "como Indiana Jones se convirtió en Indiana Jones." Y el tono de la película estaba claro, "George quería que la tercera película fuera más como En busca del arca perdida porque sentía que Indiana Jones y el templo maldito descarriló un poco," admitía Boam a Starlog.

El guionista tuvo problemas para escribir la secuencia de apertura, elaboró varias versiones, pero ninguna convencía porque no aportaban nada a la película. Al final a Lucas se le ocurrió mostrar a un joven Indy y la introducción de otro artefacto ("La cruz de Coronado"). Boam terminó su guión en septiembre de 1987, el cual conoció dos revisiones posteriores, la última data del 1 de marzo de 1988.

Tom Stoppard hizo reescrituras de guión sin acreditar, bajo el seudónimo de Barry Watson. Spielberg declaró a Empire sobre el trabajo del guionista, que, "era una historia emocional, pero no quería ponerme sentimental. La falta de conexión entre ambos fue la base para mucha comedia. Y le dio a Tom Stoppard, quien no fue acreditado, mucho para escribir. Tom es el máximo responsable de cada frase del diálogo." Pero además el guionista hizo varios cambios que mejoraron el libreto. Introdujo al villano Panama Hat. Convirtió a Donovan en el villano principal (antes moría en la escena del tanque). Eliminó las escenas de la familia de Venecia con la que se quedaban Indy y Elsa. Añadió dos pruebas en el templo del Grial, en lugar de la única que había ideado Boam (la de las cuchillas). E hizo que fuera Donovan, y no Elsa, quien disparara a Henry. El guionista cobró 120.000 dólares por su trabajo, y tras el estreno de la película y dado su gran éxito, le pagaron 1 millón de dólares adicionales en agradecimiento a sus contribuciones.

REPARTO

Como no podía ser de otra forma, Harrison Ford interpretaría de nuevo al famoso arqueólogo, pero esta vez el interés era explorar nuevas facetas de Indy. "Queríamos progresar en el personaje," explicaba el actor a Empire. "Conocerlo mejor, encontrar nuevos niveles dentro de él." Con Ford asegurado (a cambio de 2,5 millones de dólares por adelantado y un 5% de los beneficios de la película), se encargaron de reunir al resto del reparto que le acompañase en su nueva aventura.

Spielberg siempre había querido rodar una película de James Bond, y Sean Connery fue la primera opción del director para interpretar al padre de Indy, como una broma interna de que James Bond era el padre de Indiana Jones. "¿Quien sino Bond podría haber sido lo suficientemente digno como para interpretar al padre de Indiana Jones?," bromeaba Spielberg hablando con Empire. Spielberg le ofreció el papel a Connery mientras éste rodaba Más fuerte que el odio (1988). "Entre los dos superamos algunas cosas que no me convencían del guión, y todo acabó como una experiencia genial," declaró Connery. El personaje estaba escrito inicialmente como un viejo un tanto malhumorado, pero a raíz del fichaje de Connery, el personaje fue reescrito como alguien más vitalista.

A la actriz Amanda Redman (Sexy Beast) se le ofreció el papel de la Dr. Elsa Schneider, pero lo rechazó por su miedo a las ratas. El agente de la actriz Alison Doody le comunicó que Spielberg quería conocerla para dicho papel. "Nunca pensé que conseguiría el papel porque estaban buscando a una dama austriaca de 28 años y yo tenía 24 y era irlandesa," reconocía la actriz a Starlog. Tras una primera prueba, se reunió con los responsables de la película, y Spielberg le dijo que ensayara algunas escenas y las hiciera con acento. A los dos días Doody hizo sus escenas, y sólo unas pocas semanas después el papel era suyo.

Fue Harrison Ford quien recomendó a River Phoenix para que interpretara al joven Indy, después que diera vida a su hijo en La costa de los mosquitos (1986). El joven actor confesó que no se inspiró en la interpretación de Ford como el famoso arqueólogo, si no en el propio Ford. Phoenix observó al actor antes de hacer su papel y trato de no imitarle, si no interpretarlo más joven. "Tuve a Harrison allí todos los días," recordaba Spielberg a theraider.net. "Prácticamente dirigió a River, ayudándole con la lectura de frases y gestos, y hablando con él sobre como se movería Indy."

Denholm Elliott repitió su papel de Marcus Brody, a quien ya había interpretado en la primera entrega de la saga.

Lo mismo hizo John Rhys-Davies con el papel de Sallah.

El productor Robert Watts sugirió a su vecino Julian Glover, para el papel del nazi Vogel, el actor hizo las audiciones, pero no le dieron el papel. Spielberg creyó que Glover encajaría mejor interpretando al americano Walter Donovan, y sólo dos días después de perder el papel de Vogel, se lo ofrecieron, y así el británico terminó dando vida al villano principal. Glover tuvo que ensayar mucho para tener un perfecto acento norteamericano.

Otro británico, Michael Byrne, sería quien interpretaría al nazi Vogel.

Kevork Malikyan se hizo con el papel de Kazim. Curiosamente el actor había perdido el papel de Sallah en En busca del arca perdida (1981), por llegar media hora tarde a su entrevista debido a un atasco de tráfico.

El papel de Fedora recayó en Richard Young. El actor había trabajado en un capítulo de la serie creada por Spielberg, Cuentos asombrosos (1985-87), dando vida a Davy Crockett. Después de entrevistarse con muchos actores, y de no dar con ninguno adecuado para el papel, Spielberg se reunió con Young. "Nos llevamos bien al instante," recordaba el actor a amblinroad.com. "Le hablé de una aventura que tuve en Guatemala, tratando de sacar de contrabando un cuenco maya para un coleccionista de arte, y cómo casi no lo logré. Me dio una gran sonrisa, canceló el resto de sus citas para esa tarde, y me contrató en el acto." El guión no indicaba que Fedora fuera el prototipo para Indiana Jones, así que Young lo interpretó como si fuera un mercenario.

El resto del reparto lo forman Robert Eddison (que dio vida al caballero del Grial), Alexei Sayle (en la piel del sultán), y Paul Maxwell (como el villano Panama Hat).

RODAJE

La fotografía principal comenzó el 16 de mayo de 1988, y se extendió hasta el 30 de septiembre del mismo año. Fue una producción de lo más viajera, ya que visitaron España, Italia, Inglaterra, Jordania, Alemania y Estados Unidos (más concretamente en los estados de Texas, Colorado, Nuevo México y Utah). Los interiores se filmaron en los Elstree Studios (Inglaterra), donde se erigieron los decorados diseñados por Elliot Scott.

Se cuidaron todos los detalles, como por ejemplo en el vestuario. La mayoría de los uniformes nazis en la escena de Berlín, eran auténticos uniformes de la Segunda Guerra Mundial, encontrados por el diseñador de vestuario Anthony Powell en el este de Europa.

El buen ambiente fue la nota constante durante el rodaje, con Ford y Connery bromeando continuamente. El único que lo disfrutó totalmente fue John Rhys-Davies, quien sufrió de ciática y se pasó el rodaje tomando pastillas para el dolor. Por su parte, Spielberg estaba en pleno proceso de divorcio de Amy Irving durante la producción, pero no dejó que eso le afectase.

Fue un rodaje muy físico, principalmente para Ford, quien realizó muchas de sus escenas de riesgo. "Soy actor y hay oportunidades importantes para la expresión del personaje en esos momentos físicos," declaraba el actor al Sun-Sentinel. "Por eso creo que es importante hacer las cosas que hago en las películas. Pero también es lo que distingue una película de Indiana Jones de otra película de aventuras. Te sientas en el cine y sabes que lo estoy haciendo."

El rodaje comenzó en Almería, donde se rodó la secuencia del tanque, e inicialmente estaba previsto que tuviera una duración de un par de días, pero a Spielberg se le ocurrieron ideas para expandir la secuencia, y convertirla en uno de los platos fuertes de la película. El director se sentó con sus dibujantes y creó un elaborado storyboard de toda la secuencia. Fue difícil de rodar, y requirió de una semana para completarse, tal y como reconocía el director a theraider.net, "creo que me divertí más creando la persecución en papel que cuando la filmé en España."

El tanque se construyó de auténtico acero, y tenía un peso de 28 toneladas. Se construyó además, una réplica de la parte superior del tanque, para rodar la pelea sobre el vehículo, que fue montada en un remolque, el cual era arrastrado por un camión.

En la Playa de Monsul, también en Almería, filmaron la escena en la que Henry utiliza unas gaviotas para derribar una avioneta nazi, pero descubrieron a la hora de rodar, que las gaviotas no pueden ser entrenadas, y se negaban a volar, así que no les quedó más remedio que utilizar gaviotas falsas, cuando se las ve en la playa, y para el momento en que salen volando tuvieron que usar palomas.

Rodaron en otras localizaciones del sur de España. En Granada, por ejemplo, filmaron las escenas de la estación de tren de Iskenderun, siendo realmente la estación de Gaudix, adecuadamente transformada para la ocasión.

El 3 de junio de 1988, toda la producción se mudó a Inglaterra, donde rodaron interiores en los Estudios Elstree.

Filmaron a lo largo de tres días, la parte del prólogo situado a bordo de un barco en 1938. Se utilizaron una docena de tanques de descarga, y cada uno contenía aproximadamente 1.350 litros de agua. No fue una escena agradable de rodar, ya que no sólo se filmó durante el verano más frío que se recordaba en Londres, además no tenían calentadores, así que el agua estaba realmente fría.

El decorado de las catacumbas de Venecia se llenó de aproximadamente 2.0000 ratas criadas a propósito para la película. Para las escenas con fuego, se crearon un gran número de roedores mecánicos.

Rodando la escena del zepelín tuvo lugar una de las más anécdotas más recordadas del rodaje. Hacía muchísimo calor en el set, tanto que Connery decidió quitarse los pantalones porque sudaba con mucha facilidad, para así poder rodar la escena más fresco. Ford decidió imitarle, y ambos actores hicieron el resto de la escena sin pantalones.

La famosa replica de Henry a la pregunta de Indy: "¿Cómo supiste que ella era nazi?", con el: "Porque habla en sueños", no estaba en el guión, fue una improvisación de Connery e hizo que todo el equipo se partiera de risa, tanto que tuvieron que parar de filmar. Spielberg decidió dejarla en el montaje final.

Le dieron varias vueltas sobre como rodar la escena en la que Elsa besa a Indy, cuando está atado a la silla. Fue idea de Spielberg que ella le diera el beso con el mordisco. Connery opinaba que ella también debía besarle, pero el director se opuso.

Fuera de Elstree, pero sin salir de Inglaterra, rodaron la persecución de lanchas de Venecia, la cual tuvo lugar en el puerto de Tilbury en Essex. En Elstree sí filmaron el momento en que una lancha es destrozada por la hélice de un barco, y utilizaron lentes largas para hacer creer que los actores estaban muy cerca de la hélice.

El mayor susto que se llevó Ford en su estancia en Inglaterra no fue en el set de rodaje, fue en la casa donde se alojaba en Hampstead. Una noche un ladrón entró y robó joyas por un valor de 84.000 dólares. Ford llamó a la policía cuando vio al ladrón entrando en la casa de un vecino, para descubrir momentos después, que él mismo había sido víctima del ladrón.

El 8 de agosto, la producción comenzó a rodar en Venecia planos adicionales de la persecución de lanchas, cerrándose una sección del Gran Canal para el rodaje. Además se filmaron los exteriores de la iglesia de San Barnaba, en la que Indy encuentra el acceso a la tumba del caballero.

Esa misma semana, el equipo viajó a la ciudad de Petra (Jordania), para rodar los exteriores de la entrada del templo del Grial durante tres días. Spielberg y su equipo fueron invitados del rey Huséin I y la reina Noor en el palacio real en Áqaba. Y la propia reina con sus hijos llevaba a Spielberg al set de rodaje.

Lo último que rodó la primera unidad fue el prólogo con River Phoenix, tras una pausa de tres semanas, se pusieron con ella manos a la obra. Las escenas con los boy scouts se filmaron en el "Parque nacional de los Arcos" en Utah, los exteriores de la escena del tren se rodaron principalmente en Colorado, y los interiores en los Universal Studios en Los Angeles. Se usaron miles de serpientes reales de cinco variedades diferentes, y otras de goma para el momento en el que Phoenix cae sobre ellas. El actor por su parte, se mimetizó con Ford, y realizó personalmente muchas de sus escenas de riesgo.

El 21 de febrero de 1989, se filmó en Amarillo (Texas) el plano final de la película, con Indy, Henry, Brody y Sallah cabalgando hacia el horizonte. Esa tarde estuvo lloviendo, pero una hora antes del atardecer el cielo se despejó, y pudieron rodar un plano que ya forma parte de la historia del cine.

La película estaba terminada, pero Spielberg y Lucas no creían que fuera del todo redonda. "Tuvimos un gran pase de prueba," recordaba el director a Empire. "Nadie quería cambiar nada excepto George y yo. El estudio estaba extasiado, y el público nos dio un montón de puntuaciones sin precedentes. Pero George y yo estábamos preocupados porque el final del segundo acto fuera demasiado pesado, así que ideamos un par de nuevas set pieces, especialmente la persecución de motos, la cual filmamos cerca de donde George vive en el Norte de California." Esta secuencia se rodó en marzo de 1989, a dos meses del estreno de la película.

La Industrial Light and Magic se hizo cargo de los efectos visuales, como había hecho en las dos anteriores entregas de la saga, y el coste fue cercano a los 3,5 millones de dólares. Bajo la supervisión de Michael J. McAlister, la compañía de George Lucas utilizó todo tipo de técnicas, desde matte paintings (plano exterior del castillo o del aeropuerto de Berlín), miniaturas (el zepelín o el tanque cayendo por el barranco), animatronics (los animales del tren en el prólogo), títeres (momento de Indy cruzando el puente en la tercera prueba del templo), animación stop-motion (momento de la avioneta nazi estrellándose contra el túnel), y pantalla azul (huida en avioneta de Indy y Henry).

Son muchos los logros y las dificultades con las que se encontró la ILM. Como los espectaculares animatronics vistos en la secuencia inicial de la película. En Londres, construyeron el rinoceronte que ataca al joven Indy, y que estaba hecho de espuma y fibra de vidrio. Pero tres días antes de rodar, Spielberg decidió que el animal debía moverse, así que John Carl Buechler en Los Angeles se encargó, en ese corto plazo de tiempo, de conseguir que la cabeza del rinoceronte pudiera hacer todo tipo de movimientos. También crearon una boa y dos jirafas animatrónicas para la misma secuencia.

Se construyeron para la ocasión espectaculares miniaturas. Para las tomas generales del zepelín, se construyó un dirigible a escala de unos 2,5 metros de longitud. También tuvieron que construir un túnel en miniatura, de aproximadamente unos 64 metros de largo, para la escena en la que la avioneta se estrella en uno.

Para la segunda prueba del templo del Grial, "La palabra de Dios", inicialmente cuando Indy pisaba la piedra equivocada, salía una araña que comenzaba a subir por su cuerpo, pero la escena no convenció, y en un cambio de última hora, se decidió que Indy se cayera al pisar la piedra equivocada, y un plano mostrara el abismo que se encontraba bajo sus pies. Algo que se solucionó mediante la creación de un espectacular matte painting.

La tercera prueba, en la que Indy debe dar un salto de fe al cruzar un abismo, fue una idea de Spielberg, quien se imaginó la creación de un puente pintado mediante una perspectiva forzada, que lo hiciera invisible al verlo desde un determinado punto. La ILM obró la magia mediante el uso de matte paintings, miniaturas, títeres y pantalla azul.

El efecto especial más complejo de toda la película, fue la muerte de Donovan. En la que el villano se desintegra tras beber del falso Grial. Los 16 segundos de muerte en pantalla requirieron de tres días de rodaje, y fue deseo de Spielberg que se hiciera en una única toma. Nick Dudman (Batman) se encargó de crear efectos de maquillaje para la escena, trabajo que realizó en seis semanas. Primero se hicieron seis tomas separadas de maquillaje que envejecían al actor progresivamente. Tras rodar estas tomas, el resto de la escena se rodó con tres cabezas animatrónicas réplicas del actor. Finalmente se hizo la transición entre las diferentes tomas, mediante el uso de la técnica Morphing, que creó la ilusión de que las últimas fases de la muerte del villano ocurrían en un único plano sin cortes.

El mítico diseñador de sonido Ben Burtt se encargó de conseguir cerca de 800 nuevos efectos de sonido para la película. Para ello se las ingenió de todas las formas. Para la lucha de los aviones se montó en un biplano, los sonidos de disparos los obtuvo en Utah y Texas, y se desplazó hasta la demolición de una turbina eólica para conseguir los sonidos de los aviones estrellándose. Tras grabarlos los sometió a, un por aquel entonces novedoso, proceso digital para manipularlos. "Un film como éste," declaraba Burtt. "Necesita un sonido muy vivo, dramáticamente trabajado, siendo uno de los elementos que más garantiza su verdadera dimensión." Su gran trabajo le granjeó un nuevo Oscar.

John Williams regresó una vez más, para poner la música a las aventuras del arqueólogo, creando para la ocasión una de sus mejores partituras. "La relación entre Indiana Jones y su padre agregó una textura emocional bastante diferente a La última cruzada," admitía el compositor a la revista Empire. "Pero todavía había mucho espacio para la música tradicional de acción y aventuras."

La película se estrenó el 24 de mayo de 1989 en Estados Unidos, en el fin de semana del Día de los Caídos, y batió el récord de recaudación en el periodo de los tres días de la festividad, con 37.031.573 millones de dólares. Bien es cierto que, Paramount hizo que los cines aumentaran el precio de las entradas en 50 centavos. Su botín en el mercado doméstico ascendió a 197.171.806 de dólares (sólo fue superada por Batman). Siendo su recaudación final a nivel mundial de unos increíbles 474.310.887 de dólares (lo que la convirtió en la película más taquillera del año). Teniendo en cuenta que su presupuesto fue de 48 millones de dólares (aunque otras fuentes lo sitúan en 55,3 millones), fue un éxito fenomenal.

De cara a los Oscar, Indiana Jones y la última cruzada consiguió ser nominada en tres categorías, mejor banda sonora (John Williams), mejor sonido (Ben Burtt, Gary Summers, Shawn Murphy y Tony Dawe), y mejor edición de sonido (Ben Burtt y Richard Hymns), ganando sólo ésta última estatuilla.

Y en los Globos de Oro fue nominada en la categoría de mejor actor secundario (Sean Connery).

ESCENAS ELIMINADAS

Se eliminaron varias escenas del montaje final, de algunas hay material en forma de fotografías, pero las escenas cortadas nunca han sido incluidas en las ediciones de vídeo doméstico (en TheRaider.net lo explican mejor que yo). Estas son las escenas que nos perdimos de la película:

1. Originalmente Indy era llevado al apartamento de Donovan a la fuerza. Los secuaces del villano le apuntaban con un arma y para no iniciar una pelea en el campus, Indy se iba con ellos. También se mostraba más metraje del viaje de Indy al apartamento.

2. El viaje en avión de Indy y Marcus a Venecia era más largo. Durante el vuelo Indy estudiaba el diario de su padre, y encontraba un calco al carboncillo de la tabla del Grial de Donovan, y veía un bosquejo de la vidriera sobre números romanos.

3. En la película, cuando Indy y Elsa llegan al castillo de Brunwald, el mayordomo le replica al arqueólogo diciéndole que si es un lord escocés, él es Mickey Mouse. Originalmente decía Jesse Owens, pero Lucas y Spielberg creyeron que el público moderno igual no podría pillar la broma, de modo que lo cambiaron por Mae West, pero decidieron cambiarlo de nuevo por Mickey Mouse por la misma razón. Después la escena seguía con Indy y Elsa escondiendo el cuerpo del mayordomo dentro de un sarcófago, lo cual fue eliminado.

4. La huida de Sallah y Marcus de los nazis en la estación de tren, incluía un momento en el que Sallah abofeteaba a un camello, y causaba que éste escupiera sobre los nazis. Y también había un momento posterior eliminado, en el que Sallah luchaba con los nazis.

5. En la escena en la que Hitler firma el diario del Grial, se incluía a una mujer que estaba filmando en el lugar, aunque nunca se mencionaba, se suponía que era la directora Leni Riefenstahl.

6. Después de que Hitler firmaba el Grial, había escena en la que Indy golpeaba a un oficial nazi que le reprendía por entrometerse en la procesión. El arqueólogo le robaba la ropa, y se explicaba así de donde sacaba su atuendo para la escena del aeropuerto de Berlín.

7. Indy y Henry intentaban salir de Alemania en avión, pero Indy ve a Vogel y otros nazis haciendo guardia en la cola para los billetes de avión. Indy escondía a su padre, y después se colocaba en la única cola sin vigilancia, la del zepelín.

8. En la secuencia del zepelín, se incluía el personaje de un piloto de la primera guerra mundial que narraba sus hazañas a los demás pasajeros. Cuando Indy y Henry huían, el piloto se unía a su persecución. Además del biplano que usan Indy su padre, en el zepelín había otro más. El piloto se subía a él, pero al estar borracho, no arranca primero el motor antes de soltarse del dirigible, y caía a plomo. Esta escena incluía una mayor participación de Pat Roach como un agente de la Gestapo, a quien Indy dejaba inconsciente de un puñetazo, para así continuar con la broma recurrente de Ford dejando fuera de combate a Roach en cada película de la saga (ya que lo mismo le sucedía en En busca del arca perdida e Indiana Jones y el templo maldito, en las tres interpreta a diferentes personajes).

9. Una breve escena de Indy y Henry bajándose del tren en Iskenderun, para reunirse con Sallah.

10. La muerte de Kazim era un poco diferente. Éste se desplomaba en los brazos de Elsa y se deslizaba por su cuerpo. Ella miraba sus manos y estaban llenas de sangre. Spielberg no consiguió el impacto que deseaba, y dejó la escena tal y como se ve en la película.

11. Después de la escena del tanque, Indy, Henry y Brody son testigos de una gran explosión. Los nazis tratan de abrir una entrada más grande en el cañón. La escena trataba de explicar como el templo del Grial había estado oculto durante tanto tiempo. Al tener Henry un mapa de la entrada del cañón en su diario, esta escena fue considerada como innecesaria.

12. La versión alternativa, antes mencionada, de la segunda prueba en el templo del Grial, en la que Indy se topa con una araña.

VALORACIÓN

Uno de los mejores recuerdos de mi infancia, es ver en el cine con mi madre Indiana Jones y la última cruzada, es una de las experiencias más divertidas de mi vida. Y esa sensación sigue viva cada vez que vuelvo a ver la película. Y es que la tercera parte de las aventuras del Dr. Jones, es una de las mejores películas de entretenimiento que jamás se hayan filmado.

Todo funciona, desde la química de sus dos protagonistas (una suerte de dúo cómico padre-hijo), pasando por la excelente puesta en escena de Spielberg, la maravillosa música de Williams, y un guión que no sólo da lo que el público quiere, si no lo que necesita.

La película comienza como la clásica aventura de Indiana Jones (objeto sagrado, nazis, acción, chica nueva, etc), pero es la aparición de su padre, lo que hace que la película despegue totalmente. Sin lugar a dudas, Sean Connery es la gran sorpresa de Indiana Jones y la última cruzada, y es que el escocés está fantástico en un papel opuesto a todos los que había interpretado anteriormente, y en muchos momentos consigue robarle el show a su aventurero hijo.

Y es un acierto el no convertir el personaje de Connery en una especie de Indiana Jones adulto, que sería lo más fácil al tener al escocés en ese papel, si no que toman un camino más original e interesante. Connery brinda una de sus mejores interpretaciones como ese obsesivo y apocado, pero cuando quiere audaz, Jones Sr.

Además es divertido ver como al gran héroe del cine, su padre lo trata como si fuera un niño, y de ahí parte el gran sentido de humor de la película y lo que la hace funcionar. Ese tono de comedia le sienta de maravilla, y al mismo tiempo la diferencia de las anteriores entregas de la saga.

Son geniales esos momentos en los que vemos como Henry está orgulloso de su hijo, ya sea cuando tira a Vogel del zepelín, o cuando, cual caballero moderno, embiste a otro con una lanza en el sidecar. Y es más divertido aún ver como después Indy espera la aprobación de su padre, y éste finge no estar impresionado.

Tiene momentos de comedia brillantes, Hitler firmando un autógrafo a Indy; el arqueólogo y su padre sentados en dos sillas mientras toda la habitación a su alrededor está ardiendo; el "Habla en sueños"; el momento en que creen que Indy se cayó por el barranco, y éste aparece por detrás de su padre y amigos; podría estar así todo el día.

Y tiene planos que sólo pueden salir de la cámara de Spielberg, como esa elipsis que pasa del joven Indy al adulto a través de su sombrero, el como juega con las sombras en la escena en la que Vogel amenaza con disparar a Elsa, o ese maravilloso plano final de los cuatro protagonistas cabalgando hacia la puesta de sol, rumbo a su siguiente aventura.

Todo es una fiesta para los fans de la saga, desde la introducción del joven Indy (cuyo éxito daría pie a su propia serie de televisión), las siempre divertidas escenas de acción, un templo lleno de trampas y los nazis regresando como villanos. Todo estaba ahí para hacernos disfrutar como nunca.

El teaser en Utah es muy inteligente en como juega con nuestras expectativas, nos hace creer que el hombre con el fedora es Indy, para justo a continuación descubrirnos que realmente es uno de los boy scouts que presencia la escena, en ese momento un título nos indica que estamos en 1912, y somos conscientes que estamos siendo testigos de la juventud de nuestro héroe favorito. La película no podría tener un comienzo mejor.

Las escenas de acción son como maná del cielo. Cualquiera de ellas es un prodigio de entretenimiento y sentido de la acción. Ahí tenemos el ritmo de la persecución de lanchas, la espectacularidad de la batalla con el tanque, o la divertida fuga del zepelín. Todas tienen algo inherente a cuando Spielberg rueda escenas de acción, que son divertidas, ya sea a base de ver como Indy mata a tres nazis de un único disparo, a como el joven Indy se escapa del tren a través del baúl de un mago. Es toda una gozada verlas.

Los nazis son de nuevo los villanos y todos nos alegramos. Está claro que con su inclusión intentaron acercarse más al estilo de la primera parte que al de la segunda (film a veces criticado, que a mí me parece fantástico), y fue todo un acierto. No hay villanos mejores que los nazis, y Spielberg y Lucas lo saben.

Eso sí, Donovan es un villano mucho menos memorable que Belloq o Mola Ram, pero ahí están Elsa y Vogel para compensar lo que le falta al primero de carisma y presencia.

Vale que tiene algunos saltos de fe (el cruzado de 700 años), algún momento chocante (el piloto nazi estrellándose en plan kamikaze contra el túnel), y otros que no quedan claros (en un primer visionado cuesta entender como funciona la tercera prueba del Grial), pero son peccata minuta, para todo lo que nos hace disfrutar la película.

Como en muchos de los films de Spielberg, la película sirve para hablar sobre la relación entre un padre y un hijo, de la distancia que les separa y como un interés común les acerca por primera vez. Ese macguffin que es el Santo Grial sirve como catalizador para unir a dos personas separadas por una distancia insalvable de años, su búsqueda del Grial es realmente la búsqueda de su reconciliación.

Hay una escena que lo justifica todo, que es la propia película en si misma, cuando Henry está agarrando a Indy en una de las grietas del templo, mientras éste a su vez trata de atrapar el Grial, y por primera vez en toda la película (y en toda su vida) lo llama Indiana en lugar de Junior. Henry el hombre más obsesionado del mundo por el Grial, no se lo piensa dos veces, y pone por delante a su hijo, antes que su obsesión por el objeto sagrado. Le dice a Indy que se olvide de él, por primera vez Henry lo trata como un adulto, ambos se reconcilian, y cuando Indy sale de la grieta, ambos ya vuelven a ser padre e hijo, el Grial les ha unido.

Indiana Jones y la última cruzada es un disfrute constante, son dos de las horas más entretenidas que jamás se hayan visto en una pantalla de cine. Indy estaba de regreso mejor que nunca. A golpe de comedia y sentido de la aventura, la tercera parte se convirtió en la mejor película de la saga.

CURIOSIDADES

El número de muertos de la película asciende a 50 (13 de ellos obra de Indy).

La acción tiene lugar en 1912 y 1938.

Pese a interpretar a su padre, Sean Connery sólo era 12 años mayor que Harrison Ford.

Última película del director de fotografía Douglas Slocombe.

Primera película de Indiana Jones en recibir una calificación PG-13 por la MPAA. Indiana Jones y el templo maldito (1984) y Gremlins (1984), fueron las películas que provocaron la calificación PG-13, pero El templo maldito recibió una PG.

En el guión original de Boam, Donovan se llamaba originalmente Chandler.

Alex Hyde-White fue quien dio vida a Henry Jones padre en 1912, nunca se muestra su cara y fue doblado por Sean Connery.

Ronald Lacey, que interpretó al villano Arnold Toht de En busca del arca perdida (1981), tiene un pequeño papel en la película, interpretando a Heinrich Himmler en la escena de Berlín con Adolf Hitler. Lacey era amigo de Michael Sheard, quien interpreta a Hitler.

Como en todas las entregas de la saga, la película comienza con una figura que coincide con el logo de Paramount Pictures, en este caso, lo hace una roca de Utah.

En un momento de la película Indy le dice a su padre que sabe pilotar, pero no aterrizar un avión. En la realidad Harrison Ford es un consumado piloto. Esto es además una referencia a Indiana Jones y el templo maldito (1984) en la que Indy tiene que pilotar de forma improvisada un avión que se termina estrellando.

El tanque no llegaba a alcanzar los 20 km/h, por lo que a Vic Armstrong se le hizo muy complicado montar a caballo al lado del tanque, haciendo que éste pareciera ir rápido.

Muchos miembros del reparto trabajaron en películas de James Bond, John Rhys-Davies (007: Alta tensión), Alison Doody (Panorama para matar), Julian Glover (Sólo para sus ojos), Stefan Kalipha (Sólo para sus ojos), Pat Roach (Nunca digas nunca jamás), Eugene Lipinski (Octopussy), Michael Byrne (El mañana nunca muere) y Vernon Dobtcheff (La espía que me amó).

La mujer de Donovan (Julian Glover) está interpretada por Isla Blair, mujer en la vida real de Glover. Y está acreditada como Mrs. Glover.

Como en muchas otras películas de su carrera, Spielberg incluye un plano característico, el de una imagen reflejada en un espejo retrovisor, en este caso, durante la persecución de la avioneta nazi a Indy y Henry en el coche.

Henry descubre a todos, que el nombre de Indiana viene de un perro que tuvo su hijo cuando era un niño. En los 70, George Lucas tuvo un perro de raza malamute de Alaska llamado Indiana y del cual tomó su nombre para el arqueólogo.

Aparte de Harrison Ford, Pat Roach es el único actor en participar en las tres películas de la trilogía original. Interpretó a un sherpa y al mecánico que pelea con Indy al lado del avión en En busca del arca perdida (1981). En Indiana Jones y el templo maldito (1984) era el jefe de los guardias que moría aplastado por un rodillo. Y en esta película es uno de los miembros de la Gestapo, que corre al lado de Vogel hacia el zepelín.

Durante el prólogo en el tren, se puede ver como éste transporta material de un mago llamado "Dr. Fantasy's Magic Caboose", el cual era un guiño a Frank Marshall, quien durante años usó ese seudónimo como mago amateur. Marshall hizo una actuación sorpresa durante el rodaje.

Cuando Indy dice en clase: "Si es la verdad lo que les interesa, el Dr. Tyree da filosofía en la clase del fondo", fue un cambio introducido en el guión por el propio Ford, como homenaje a su profesor de filosofía Dr. William Tyree de la universidad de Ripon.

Uno de los vehículos militares de los nazis, el Volkswagen Kubelwagen no iniciaría su fabricación hasta 1940, es decir, hasta dos años después de la fecha en la que se fija la película.

Se puede oír el famoso "Grito Wilhelm" en el tiroteo del desierto entre los nazis y la "Hermandad de la espada cruciforme", tras el lanzamiento de la primera granada.

Michael Jackson visitó el set de rodaje de la película.

Se explica que Indy se hizo la cicatriz de su barbilla al usar un látigo. Harrison Ford se la hizo en un accidente de coche cuando tenía 22 ó 23 años.

Cuando rodaron la escena de Berlín, donde Indy recupera el diario, Spielberg le pidió a todos los extras que hicieron el saludo "sieg heil" con una mano, y que la otra la pusieran en su espalda y cruzaran los dedos.

El momento en el que la bolsa de Indy se engancha en el cañón del tanque, Harrison Ford hizo él mismo la escena sin el uso de dobles. El equipo fue echando sobre el actor tierra desde arriba.

Lo que dice el soldado nazi que ve por el periscopio como Indy lucha es: "Los americanos, pelean como chicas."

BIBLIOGRAFÍA

Empire Magazine (nº 227)

Indiana Jones And Me: John Williams (Empire Magazine, 11 oct 2012)

Starlog Magazine (nº 111, 137, 142, 144, 145, 147, 276)

Spielberg gives his all again (Sun Sentinel, 24 may 1989)

Reluctant Hero (Sun Sentinel, 28 may 1989)

TheRaider.net

Indiana Jones: Making the Trilogy (DVD extra, 2003)

The Stunts of 'Indiana Jones' (DVD extra, 2003)

Revista Imágenes de actualidad (nº 75)

IMDb

The Creation of the Donovan FX transformation (YouTube)

Revisiting Cinefex (40) (Graham Edwards)

Harrison Ford: The Films (Brad Duke, 2004)

Steven Spielberg: Biografía no autorizada (John Baxter, 1996)

Indiana Jones and the Last Crusade: Learning from Stoppard (Creative Screenwriting, 13 jun 2016)

Richard Young Discusses His Role As Fedora in Indy 3 (Amblin Road, 7 ene 2021)

Nacidos para ser malos (Timon Singh, 2018)

The Complete Making of Indiana Jones (J.W. Rinzler, 2008)

Steven Spielberg: Interviews, Revised and Updated (Brent Notbohm, Lester D. Friedman, 2019)

Steven the Good (The New York Times Magazine, 14 feb 1999)