Fuga de Alcatraz
"Bienvenido a Alcatraz."
Este artículo contiene spoilers, no leer si no se quiere conocer partes esenciales de la trama de la película.
Frank Morris es enviado a la prisión de Alcatraz, pronto comenzará a planear su fuga.
LA GRAN EVASIÓN
La prisión de Alcatraz, situada en la bahía de San Francisco, fue abierta en el año en 1934 y clausurada en 1963. En ella cumplieron condena criminales tan populares como Al Capone, James 'Whitey' Bulger, Alvin Karpis o Robert Franklin Stroud (también conocido como “El hombre pájaro").
El cine ha contado muchas historias teniendo a la prisión como epicentro de las mismas (algunas basadas en hechos reales), dando pie a películas que han aumentado su fama y misticismo, como El hombre de Alcatraz, La Roca, Homicidio en primer grado, siendo Fuga de Alcatraz (Escape from Alcatraz, 1979) la mejor de todas ellas.
La prisión vivió catorce intentos de fuga, y se supone que la única que terminó en éxito fue la llevada a cabo por Frank Morris y los hermanos Anglin en 1962, y digo se supone, porque la versión oficial dictaminó que se ahogaron, aunque nunca se encontraron los cuerpos.
Al año siguiente, J. Campbell Bruce publicó el libro "Escape from Alcatraz" sobre la historia de la prisión, donde se relataban los distintos intentos de fuga, incluida la realizada por Morris y compañía. En 1964, Campbell le envío el libro al director Don Siegel con idea de convertirlo en película. Éste le contestó mediante una carta que el libro necesitaría bastante trabajo para llevarlo al cine.
Richard Tuggle (En la cuerda floja) se hizo eco de la famosa fuga de Morris durante una visita a la isla, donde un guía le contó la historia. No sería hasta tres años después, que Tuggle quiso convertirla en un guión de cine, en un momento en el que se quedó sin trabajo en una revista de salud en la que era editor. Encontró el libro de Campbell, que tomó como guía. Tuggle se reunió con éste e hizo un trato con él, bajo el cual recibiría un porcentaje de las ganancias si lograba vender el guión. Tuggle quiso saber quien tenía los derechos de su adaptación al cine, y como el libro estaba agotado, exigía mucho papeleo y daban por sentado que no podría vender el guión, la editorial McGraw-Hill se los dio gratis, algo impensable a día de hoy. Después de eso, Tuggle recurrió a otro libro, éste de escritura de guiones (nunca había escrito ninguno) y por fin pudo trabajar en el libreto. Lo hizo en San Francisco, desde un apartamento desde el que veía la isla de Alcatraz. Buscó información en el FBI y en la oficina de prisiones, tratando de recomponer como se realizó la fuga, gracias también al libro de Campbell. Después de seis meses completó el guión y se mudó a Los Angeles.
Una vez en la ciudad angelina, Tuggle consiguió gracias al "Gremio de escritores" un listado de agentes que aceptarían recibir su guión (no eran precisamente los mejores de la ciudad). Trató de hacérselo llegar a todo el mundo en Hollywood, pero le dieron con la puerta en las narices una y otra vez. Así que al final decidió enviarle el guión al director Don Siegel. Según contaba Siegel, Campbell le había mostrado a Tuggle la carta que le había enviado años atrás. Además Siegel había rodado anteriormente en San Francisco, y al guionista le gustaba su película carcelaria Motín en el pabellón 11 (1954). Todo hacía presagiar que Siegel era el director perfecto.
Tuggle llamó a Lenny Hirshan, el agente de Siegel, y le habló de su guión. El director lo recibió a finales de marzo de 1978, y le gustó de inmediato, pero inicialmente estaba comprometido con rodar Das Boot en Alemania. Siegel creyó que el personaje de Frank Morris era perfecto para Clint Eastwood y le envió el guión. Al actor le interesó el proyecto, y quiso que fuera su siguiente película. Pero quería también ser el productor bajo su sello Malpaso, esto le convertiría en el jefe, pero Siegel quería que esta película fuera suya, y no estaba de acuerdo con Eastwood. El director tomó una decisión que lo convertiría en el máximo responsable de la película, compró personalmente el guión de Tuggle a cambio de 100.000 dólares. Esto provocó una pelea entre Eastwood y Siegel, y el segundo decidió llevar el proyecto a Paramount en lugar de a Warner, estudio con el que Eastwood tenía un acuerdo. Curiosamente el guión ya había sido rechazado previamente por Paramount, pero aceptaron el nuevo guión.
El proyecto de Das Boot se retrasó, lo que le dio la oportunidad a Siegel de hacerse cargo de Fuga de Alcatraz de forma inmediata (finalmente sería Wolfgang Petersen quien dirigiría Das Boot).
Siegel comenzó a buscar otros actores para dar vida a Frank Morris, pero ninguno encajaba, y en Paramount le convencieron para que cediera y aceptase las condiciones de Eastwood (el estudio sabía que éste era un valor seguro para la taquilla). Actor y director hicieron las paces y de esa forma la película sería producida por The Malpaso Company (aunque Eastwod y Siegel jamás volvieron a trabajar juntos).
Eastwood aportó sus propias ideas al guión, y según confesaba Siegel, éste mejoró mucho.
REPARTO
Con Eastwood encargándose de dar vida a Frank Morris, era necesario ensamblar al resto del reparto. Aunque Eastwood acostumbraba a trabajar con su troupe habitual de actores, para Fuga de Alcatraz decidió buscar a interpretes con los que no hubiera trabajado antes. Así el reparto se formó por sólidos actores de carácter.
Patrick McGoohan dio vida al alcaide de Alcatraz Warden Arthur Dollison, Roberts Blossom interpretó a Chester 'Doc' Dalton, Jack Thibeau y Fred Ward encarnaron a los hermanos Anglin (compañeros de fuga de Morris), Larry Hankin dio vida a Charley Butts (quien completa el grupo que trata de fugarse con Morris), en Paul Benjamin recayó el papel del recluso English, Bruce M. Fischer se hizo con el papel del odioso Lobo, y Frank Ronzio interpretó al preso Tornasol.
RODAJE
La fotografía principal de la película comenzó el 16 de octubre de 1978 y se completó en enero de 1979. Tuvo lugar en la propia isla de Alcatraz, y sólo salieron de ella para rodar en los Paramount Studios, donde se crearon algunas celdas.
La idea de Siegel siempre fue rodar en la isla de Alcatraz. Se reunieron con la "Comisión de Parques y Recreación" para conseguir los permisos, donde les advirtieron que habría visitas de turistas cada treinta minutos, lo que no habría hecho posible el rodaje. Al final la negociación fue sobre ruedas, ya que Eastwood hizo uso de su encanto con los miembros de la comisión, la mayoría mujeres, y gracias a su intervención buscaron la forma de rodar en la famosa isla (aunque no fue un rodaje exento de problemas).
Por una parte, el estado de la prisión era pésimo por su desuso. Por lo que Paramount tuvo que gastarse cerca de 500.000 dólares en renovarla y hacer viable el rodaje (por ejemplo no había calefacción), y hacer creíble el estado de la prisión en la época exacta que narra la película. Además, para tener electricidad, tuvieron que conectar la prisión a la red eléctrica de San Francisco mediante 25 kilómetros de cable.
Entre el 20 de noviembre de 1969 y el 11 de junio de 1971, la isla de Alcatraz fue tomada por un grupo de nativos estadounidenses y varios partidarios suyos, a modo de protesta. Durante dicha ocupación éstos hicieron graffitis por toda la isla. Cuando llegó la hora de rodar, esos graffitis eran incongruentes con el momento en que acontecía la historia (1962), por lo que se vieron obligados a taparlos. Como la "Comisión de Parques y Recreación" los consideraba parte de la historia de la isla, no podían ser borrados, así que la producción los ocultó con una pintura soluble al agua, la cual retiraron una vez concluyó el rodaje. Tampoco les permitieron utilizar agua salada para crear efectos de lluvia, para así evitar problemas de erosión en las instalaciones.
Uno de los problemas que se encontraron durante el rodaje, fue el duro clima que había en la isla, actores y equipo lo sufrieron en sus carnes, sobre todo durante las tomas nocturnas.
Al final las visitas con turistas se siguieron produciendo mientras rodaban la película. Éstos se llevaban la sorpresa de encontrarse con Clint Eastwood rodando una película en el lugar. El actor intercedía a hablar con ellos para que les permitieran rodar, a cambio de firmar autógrafos y hacerse fotos. Pero ni por esas conseguían rodar con una cierta normalidad, así que al final se tomó la decisión de configurar muchas escenas durante la noche, en horarios en los que los turistas ya no se encontraban en la isla.
No se usaron dobles en la película, todos los actores hicieron sus propias escenas de riesgo, incluidas las peleas.
Originalmente la película terminaba con el plano de la cabeza falsa creada por Morris, y no se incluía la escena en la que el alcaide se encuentra un crisantemo en la isla Ángel (hasta la que supuestamente llegaron los tres fugados), y en la que no crece esta flor. Habían filmado esta escena e Eastwood prefería terminar la película con ella, Siegel se encontraba rodando Golpe audaz (1980), y según contaba Tuggle, el director le dio el beneplácito al actor para que la incluyera.
La película se estrenó en Estados Unidos el 22 de junio de 1979, y resultó ser un éxito de taquilla y crítico. Amasó en su país de origen 43.000.000 de dólares, una cifra excelente para una producción que había costado sólo 8 millones de dólares.
VALORACIÓN
Fuga de Alcatraz es una de mis películas favoritas de los setenta, y una de las películas más redondas de las respectivas carreras de Eastwood y Siegel. Fue su última película juntos, y no podría haber sido mejor.
La película empieza de una forma sensacional, con la gran presentación de Morris, en su llegada a "La Roca", y que culmina con ese: "Bienvenido a Alcatraz". Además de servir para introducir al protagonista, también sabemos gracias a esas lluviosas y oscuras imágenes, lo dura que será la vida allí, y lo difícil que puede resultar una fuga en ese lugar.
Al contar la historia desde el punto de vista de Morris, vamos conociendo al mismo tiempo que él a los demás reos, y descubriendo como funciona la prisión. Y desde el primer momento vemos que Morris es alguien especial y que a la mínima tratará de fugarse. En su primera reunión con el alcaide le roba un cortauñas, y pronto comienza a hablar con los reclusos de las posibilidades de una fuga. Alcatraz no es lo suficientemente hermética para retenerle dentro.
La película sabe cómo hacer que simpaticemos con el personaje de Morris, por ejemplo, metiendo al típico personaje que se emperra en hacerle la vida imposible (Lobo), y al que le da su merecido. Pero está bien introducido, porque la pelea entre ambos es la que provoca que Morris acabe con su culo en el bloque D, esa mala experiencia es una de las motivaciones para querer escaparse de la prisión. Y la liberación de Lobo poco antes de la fuga, le imprime unas dosis de tensión extra al tercer acto, ya que Morris tiene otra razón para fugarse, evitar que éste le mate.
Lo que siempre me ha fascinado de la película es que por imposible que sea la tarea que tienen por delante Morris y sus compañeros, sabemos que realmente lo consiguieron, sin importar si al final se ahogaron o no, llevaron a cabo una fuga increíble, y la película nos hace partícipe de ella, contándonos de forma minuciosa cada detalle de la misma, y resulta una gran experiencia. Es una historia más grande que la vida.
Una de las razones por las que nos gusta la película, es que sabemos que Morris es un hombre inteligente y respetamos esa inteligencia, y nos gusta ver cómo se las arregla a cada paso para lograr que su plan de fuga salga adelante.
Me encanta como el guión resuelve algunas escenas siempre tirando de ingenio, como, por ejemplo, el momento en el que Morris tiene que sacar del taller una cuña metálica, y lo consigue al pasar por el detector de metales con dos cuñas, una que le quitan los guardias y otra que logra ocultar en su zapato. O el momento en el que mete en el maletín de su acordeón un ventilador, que después utilizará como taladro, y que consigue ocultar ante los guardias, al ofrecerse a que le revisen su maletín en un control, lo que les hace pensar que no oculta nada, y le dejan marchar.
Tiene momentos de tensión excelentes, como ese que implica a Doc con el hacha en la mano, y que no sabemos hasta el último momento, que en lugar de atacar al guardia, lo que va a hacer es cortarse los dedos de la mano. O ese instante durante una de las incursiones de Morris por los interiores de la cárcel, en el que un guardia se percata que éste no se mueve en la cama (el protagonista ha puesto una cabeza falsa en su lugar), y cuando a va tocarle, Morris aparece en su cama (Siegel nos hace creer que todo se va a ir al traste, pero inteligentemente nos sorprende con el regreso de Morris fuera de cámara).
Pero la película me gana por pequeños momentos, uno que me encanta, es ese instante antes de la fuga, en que Morris se despide English, simplemente respondiendo a su "Hasta luego" con un "Adiós". Al segundo no le hace falta más para saber que no volverá a ver a su amigo. Y es fantástico ese diálogo entre Charley Butts y Morris, en el que el primero le pregunta: "¿Cómo fue tu infancia?", y el segundo le responde: "Corta." Lo dice todo del protagonista con muy poco.
Y es curioso como se las arregla la película para convertir al alcaide en el villano de la función, cuando los protagonistas son todos unos peligrosos criminales, y consigue que nos pongamos de parte de ellos. Patrick McGoohan compone un meticuloso alcaide, emperrado en que los presos cumplan su condena, sin importarle que si se reinsertan en la sociedad, y mediante algunos detalles la película consigue que le odiemos, como al prohibirle a Doc que pueda pintar, o enfurecer tanto a Tornasol que le provoca un ataque al corazón.
Los personajes están muy bien definidos, y la película se toma su tiempo en presentarlos a todos y en crear interesantes interacciones entre ellos. Y los actores resultan ser perfectos para cada papel. Eastwood como siempre está formidable dando vida a un tipo duro, y lleva el peso de la película con total convicción. El mencionado McGoohan crea un villano memorable. Fred Ward da muestras del carisma que le acompañaría en el resto de su carrera. Y actores como Roberts Blossom, Paul Benjamin, Larry Hankin y Frank Ronzio parece que hayan nacido para dar vida a los personajes que interpretan.
Y el final de la película me parece perfecto, con el alcaide encontrando el crisantemo. Por una parte, se puede suponer que los tres fugados se han ahogado, pero por otra, el que aparezca la flor en otra isla nos insinúa que Morris y los Anglin tuvieron éxito en su fuga. Es un final abierto que deja en manos del espectador decidir qué ha sucedido.
La idea de introducir la flor en la escena final me parece brillante y tiene sentido acabar con ella la película. Doc se la pasa a Morris (que representa para el primero aquello que no pueden arrebatarle, la esperanza, pero que desgraciadamente termina perdiendo), y esa flor pasa a representar la esperanza de Morris de salir de la cárcel, y el que el alcaide la encuentre da a entender que ha salido victorioso (al menos moralmente).
Y ese es el tema de la película, la esperanza, y como no debemos perderla por nada en el mundo, aunque en ocasiones cueste hacerlo. Es lo que motiva a Morris a vivir, largarse de Alcatraz cueste lo que cueste, esa idea le hace superar todas las pruebas y dificultades que se le presentan.
La película transmite ese aire de cine duro y áspero de los 70. La historia está contada de una forma eficaz sin demasiadas florituras, pero se nota obra de un narrador nato. Y es que Siegel rueda la película con su buen oficio de siempre, sin grandes alardes, manteniendo siempre una gran naturalidad y verosimilitud, lo que ayuda a que nos creamos lo que sucede ante nuestros ojos.
El director cerró con Fuga de Alcatraz una década de los setenta fabulosa, en la que realizó títulos tan destacados como Dos mulas y una mujer (1970), El seductor (1971), Harry el Sucio (1971), La gran estafa (1973), y El molino negro (1974).
Fuga de Alcatraz es una película tan sólida como la propia "La Roca". Una obra cumbre dentro de las carreras de Eastwood y Seagal. Y de lo mejor del cine de los setenta y del género carcelario. Pasar estas dos horas en Alcatraz no son ninguna condena, si no todo un placer para un amante del cine.
CURIOSIDADES
Clint Eastwood ya había visitado Alcatraz en la película Harry el ejecutor (1976).
Mientras rodaba en los estudios de Paramount Fuga de Alcatraz, a Siegel le ofrecieron rodar Golpe audaz (1980), que terminaría siendo su siguiente película.
Primera película de los actores Danny Glover y Carl Lumbly.
Clint Eastwood y el guionista Richard Tuggle trabajaron juntos En la cuerda floja (1984), dirigida y escrita por Tuggle.
Hay una escena incluida en el guión que nunca se llegó a rodar, en la que Morris se encuentra en su celda durante las Navidades, y tiene un caramelo que le han entregado, al igual que al resto de los reclusos, cuando le quita el envoltorio se le cae y va a parar fuera de su celda y no consigue alcanzarlo.
Fue la quinta y última colaboración entre Clint Eastwood y Don Siegel.
Fred Ward hizo una parodia de su papel en esta película en Agárralo como puedas 33 1/3: El insulto final (1994).
El personaje de Charley Butts se basa en el preso Allen West, compañero de fugas de Morris, quien a diferencia de lo que muestra la película, no llegó a fugarse, no porque le entrara el miedo y se retrasara, sino porque la noche de la fuga no logró quitar la rejilla de la ventilación de su celda, y los otros tres presos tuvieron que dejarle atrás.
La película de guerra que los protagonistas ven en la prisión es Comando (1962), dirigida por Don Siegel.
Quentin Tarantino le dedica a la película un capítulo en su libro "Cinema Speculation".
BILIOGRAFÍA
A Siegel Film: An Autobiography (Don Siegel, 1993)
Cinema Retro Magazine (Nº 15)
Clint: The Biography of Cinema's Greatest Ever Star (Douglas Thompson, 2007)
Clint: The Life and Legend (Patrick McGilligan, 1999)
Reel Power: The Struggle for Influence and Success in the New Hollywood (Mark Litwak, 1986)
Alcatraz, una prisión con mucha historia (National Geographic, 3 oct 2011)
Clint Eastwood: Interviews (Robert E. Kapsis y Kathie Coblentz, 1999)
Clint Eastwood: A Biography (Minty Clinch, 1995)
The Great Escape from Alcatraz (Alcatraz History)
Labels: cine 70's, películas de culto
5 Comments:
Gran informacion me gusto mucho la pelicula.
Comparto tu entusiasmo por esta pelicula.Clint tiene carisma a raudales y ya aqui si encima le ponen esa voz de Constantino romero,no veas.Es de las mejores pelis de prisiones que hay,y eso que hay muchas pero ésta es entretenidisima.En los 70 tambien estaba El expreso de Medianoche aunque esa es durisima. Cuando la vi no recordaba lo de Fred ward en Agarralo como puedas,y eso que me encanta esa saga pero no cai,mas bien.Siegel es que tiene peliculas muy buenas,y en los 70 dió el pelotazo con grandes titulos y en asociacion con Clint.Peliculon y gran historia(esos no se ahogaron ni de coña,jeje).Tambien sobre Alcatraz siento predileccion por El hombre de Alcatraz y bueno,faltaria mas,La roca.Gran reseña.Saludos Rodi
¡Muchas gracias Marco!
Es una gran película, dentro del cine carcelario se me ocurren pocas mejores o que estén a su altura ("Cadena perpetua", "El expreso de medianoche", "La leyenda del indomable" y poco más).
El personaje de Morris le sienta como anillo al dedo a Eastwood, creo que es de sus mejores papeles.
Cuando termina al peli yo también siento que no se ahogaron, pero puede que sea porque la peli termina muy arriba y quieres creer que lo consiguieron (y eso que se trata de peligrosos criminales jeje).
También me encanta "La Roca", y "El hombre de Alcatraz" la tengo pendiente.
Muchas gracias por comentar :)
Saludos.
Gran reseña Rodi. Fuga de Alcatraz es una de mis pelis favoritas junto con Braveheart ¿Y en qué se parecen? Que está ahí Patrick McGoohan haciendo de malo como él solo sabe. Qué casualidades.
Muy dura la escena del hacha aunque más duro es el porqué lo hace.
Fantástica crónica.
Saludos!
Muchas gracias Edu! McGoohan siempre es bueno, pero haciendo de villano mejor (también lo recuerdo en varios episodios de Colombo de maloso).
Es una peli dura (como el propio Eastwood), pero muy entretenida.
Gracias de nuevo por comentar.
Saludos!
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